No os penséis verla, tenéis que verla. La despedida tras 17 años siendo Lobezno de Hugh Jackman se merece que reservéis asiento, compréis palomitas y pañuelos, porque las necesitaréis.
Desde un primer momento, el director, James Mangold (mismo director de ''Lobezno: Inmortal'') nos deja claro el tono de la película, serio, cruel, con aires de despedida. La película se divide, para mí, en tres partes claramente diferenciadas por el cineasta, llenas de mitología y bestialidad, porque Logan es al final, una película sobre una bestia.
Las actuaciones son demasiado buenas, sufres, te emocionas, lloras... Los diálogos de Charles, las miradas de Laura y evidentemente la brutalidad de Logan hacen de esta película un fin perfecto hablando en actuaciones. Dafne Keen es necesaria en esta vida, y es un puntazo que se doble a sí misma en castellano.
Hablando de adaptación, creo que se adapta bien aún siendo diferente al contexto del cine, si ya habéis visto la película sabréis a que me refiero, está claro. El problema es que esto afecta a la trama en un punto, ya que en el momento más álgido de la película se siente un poco forzado todo lo que pasa.
La fotografía es sin duda lo que más me cautivó de la cinta, al igual que los diálogos , pero más la fotografía, me pasé todaa la proyección preguntándome como habrían colocado las cámaras, flipante. Las escenas de acción son genailes, muy ágiles y brutales, y está claro que se merece la clasificación que tiene.
En conclusión, a Logan le falta poco para ser una película perfecta, pero no lo es, por lo que le doy 4 estrellas y media, de cinco.
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